Jennie Allen
Puedes elegir la esperanza en medio del caos. La visionaria detrás de IF: Gathering, con un millón de personas, desafía a las mujeres cristianas a transformar sus perspectivas y sus vidas al interrumpir sus pensamientos en espiral y darse cuenta del poder que les da Dios para pensar de manera diferente. La oradora y profesora de la Biblia Jennie Allen escucha todo el tiempo a mujeres que se sienten atrapadas en patrones de frustración y derrota. En su búsqueda de una solución, ha aprendido que la mayor batalla espiritual de nuestra generación se está llevando a cabo entre nuestros oídos. Cómo pensamos da forma a cómo vivimos. Por lo tanto, es crucial que aprendamos a detener nuestros pensamientos obsesivos y rechacemos ser víctimas de patrones tóxicos como la victimización, la ansiedad y la distracción. En este libro, Jennie se basa en la verdad bíblica y los descubrimientos recientes de la neurociencia para mostrar exactamente cómo podemos luchar contra los enemigos de la mente con la verdad de quién es Dios y de quién nos llama a ser. ¿Tus pensamientos te mantienen cautiva? Nunca voy a ser lo suficientemente bueno. Otras personas tienen mejores vidas que yo
Biblia tamaño manual, ultrafina y con letra grande. Tapadura, cinta marcadora y fotos a color de Tierra Santa. Su encuadernación de lujo con el León de Judá, con página para dedicatoria, y cinta marcadora, hacen que la Santa Biblia RVR 1960 sea ideal para el uso personal o para regalo. Con letra grande y las palabras de Cristo destacadas en rojo, la Biblia incluye la esencia de Tierra Santa con preciosas imágenes a todo color, que nos invitan a orar por el pueblo de Israel. Esta elegante edición conserva la belleza clásica y la elocuencia de la Reina Valera Revisada 1960.
Ya sea que acumulaste tantas emociones que podrías explotar o que te disociaste tanto de ellas que no sabes lo que sientes, en este libro encontarás un reflejo de tu proceso, pues la autora ha pasado por ambas etapas. En los últimos años, sin embargo, aprendió a escuchar lo que las emociones trataban de decirle y descubrió una verdad que cambió todo para ella: los sentimientos no están para ser arreglados, sino para ser sentidos. Tienen la misión de conectarnos con nosotros mismos, con los demás y con Dios de una manera mucho más profunda de lo que podemos imaginar.